El pasado jueves 8 de agosto los niños bielorrusos que la Hermandad viene acogiendo cada verano dentro del Programa de Acogida y Saneamiento que organiza la Confederación de Hermandades Santos Cirilo y Metodio partieron para su tierra natal, después de un verano muy intenso.
Desde su llegada, un ya lejano 28 de junio, hasta hoy se han ido sucediendo las diversas actividades organizadas por los responsables del programa. Tanto las revisiones médicas y odontológicas, las excursiones a Guadalpark y Rota, la recepción oficial celebrada en la Basílica de la Trinidad y la fiesta de despedida en las dependencias de la Hermandad, se han desarrollado sin ningún contratiempo.
Todo ello junto con el cariño de las familias de acogida, hace que la estancia de los niños en nuestra región esté llena de recuerdos imborrables en la memoria de todos los que han disfrutado de la presencia de estos maravillosos seres que ya forman parte de nuestras vidas. A todos aquellos que han colaborado para que este proyecto siga siendo una realidad muchas gracias.
Sólo nos queda trabajar para que dentro de menos de un año, los niños vuelvan a estar con nosotros.